Regreso a este apartado de las críticas en donde hoy os comentaré la nueva película de Wes Anderson, "Moonrise Kingdom". Debo decir que me ha encantado y ha sido toda una gran sorpresa. Pero vayamos por partes como dijo Jack el Destripador.
Una película muy bien acogida en Cannes y que espero que en los Globos de Oro y los Oscars tenga algún reconocimiento porque de verdad que se lo merece. La historia transcurre en el año 1965, en una isla junto a la costa de Nueva Inglaterra. La desaparición de dos jóvenes hace que la tranquila comunidad vaya en su búsqueda; el único policía del lugar (Bruce Willis) y el jefe del campamento de “scouts” (Edward Norton) ponen en marcha una improvisada operación de búsqueda, mientras los jóvenes disfrutan de su compañía (lejos de todos los demás) y del poderoso vínculo romántico que los ha unido (el tema de amor entre los dos protagonistas está brillantemente tratado)
La cinta pasa a una velocidad perfecta, no aburre en ningún momento y además hay ratos muy cómicos. La cinta contrasta muy bien los personajes más maduros de edad, casi sin vida, junto con los personajes más jóvenes con más optimismo pero viviendo en un mundo donde creen que todo es posible.
Del autor, hace mucho que no veo ninguna, creo que la última fue "Life Aquatic" pero sí que he reconocido, por ejemplo, personajes excéntricos característicos de "Life Aquatic". En cuanto a lo técnico, Anderson es un gran director de actores y como Ridley Scott, es un gran detallista en cada toma. Cuida mucho lo visual al crear un mundo surrealista pero muy real para el público. La música, obra de Alexander Desplat también está muy bien conseguida y encaja muy bien con lo que se ve en pantalla. Anderson retrata con mucho cuidado el tema de lo absurdo que puede llegar a ser el ser humano.
En lo que respecta a los actores, el reparto es brillante: Bill Murray, Frances McDormand, Bruce Willis, Edward Norton, Tilda Swinton, Harvey Keitel, Jason Schwartzman y, los auténticos protagonistas, Jared Gilman y Kara Hayward que representan a los dos jóvenes que escapan y se enamoran. Debo decir que son los que se llevan el peso de la peli y la verdad es que es su primera incursión en este mundo. Un Bill Murray casi de 10 con unos momentos fantásticos, Bruce Willis correcto como policía e incluso sorprende y Edward Norton que ya se le echaba de menos, con un papel que ojalá repita en trabajosvenideros.
Una historia a modo de cuento infantil, Pedro es el protagonista y el lobo son los mayores que van en busca y captura de los chicos y ahí se crea la paradoja, resulta que los chicos que quieren capturar, son lo que necesitan para que su vida cambie a mejor. También tiene algo de nuestra infancia, tiene algo que une al espectador.
En general, Wes Anderson consigue contarnos un cuento infantil muy humano, real y maduro. También es cierto que es un director nada fácil de pillar pero realmente a aquellos que no la hayáis visto, os invito a verla porque merece la pena. Un triunfo sin duda.
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